Ethos y Principios Fundamentales
Avodah¹: La adoración, el trabajo y el servicio es lo que nos lleva a colaborar juntos en todo nuestro trabajo, para la gloria de Dios.
Nuestro trabajo es un regalo de Dios. Dios nos proporcionó el trabajo en una relación íntima con Él. Dios nos diseñó, colocó dones en cada uno de nosotros, y nos desplegó en el trabajo de su reino. Él se deleita en vernos trabajar. Él desea continuamente relacionarse con nosotros en nuestro trabajo, familia, comunidad y servicio. Nuestro testimonio en comunidades y ciudades, y ante Dios, habla a través de nuestro trabajo y nuestras palabras. (Génesis 1:26-28, 31, 2:15 29:27; Éxodo 3:12, 21:6; Salmo 139; Jeremías 33:3; Malaquías 3:17; Mateo 13:31-33; 22:37-39, 25:29; Hechos 1:8; 1 Corintios 10:31, Efesios 1:7-10, 2:10; Colosenses 3:17,23-24)
Hesed: La bondad, la misericordia y la gracia son lo que nos mantiene unidos expresando y promoviendo la bondad amorosa para cada individuo, comunidad y nación.
El carácter y las acciones de Dios se describen a través de muchas imágenes y palabras en el Antiguo Testamento: amor, bondad amorosa, misericordia, buenas acciones, misericordioso, lleno de gracia, inquebrantablemente leal, pacto de gracia, amor inagotable, bondad eterna, amor extravagante, leal… en el hebreo era una sola palabra, Hesed. Los matices de significado, las acciones observables y la relación del alma con Dios nos llevan a fusionar el corazón de Dios con el amor al prójimo y a los enemigos. Somos testigos de la bondad amorosa, lo que da lugar a nuevas creaciones y comunidades. (Génesis 19:19, 20:13, 24:12,32:10, 47:29; Éxodo 15:13, 34:6-7, Números 14:18… y otros 25 libros del Antiguo Testamento. La Septuaginta griega tradujo hesed como misericordia, justicia, gracia, esperanza, imagen, gloria, esperanza salpicada en 15 libros del Nuevo Testamento).
Nadiyb: La generosidad, la nobleza y la voluntad de compartir es lo que nos sostiene; vivimos y practicamos la generosidad.
Dios es generoso y es explícito en su generosidad. Su generosidad está enraizada en su relación con nosotros, y para nosotros unos con los otros. El obrar de Dios en la creación puede transformar la semilla más pequeñita en un refugio para muchos pájaros. Los efectos multiplicadores del espíritu de generosidad demuestran el amor y el reino de abundancia de Dios. Somos testigos de la gracia ilimitada de Dios para este mundo.
(Génesis 1:29, 12:3; Isaías 32:8; Mateo 6:25-34, 14:13-21; Marcos 4:31-32; Efesios 3:20; 1 Corintios 13:8; 2 Corintios 8:9, 9:7, 9:10-15; Santiago 1:17; Apocalipsis 21:6, 22:17)
Tsadiq: La conducta justa, recta, es la forma en que actuamos y promovemos la justicia para las comunidades, las ciudades y las generaciones.
Dios nos llama a conducir nuestro carácter y trabajo con justicia e integridad. Cuando nos adherimos a esta conducta, los justos prosperan, la ciudad se alegra. Cuando hay una reorientación fundamental de la vida hacia Dios, hay una perspectiva eterna del Reino de Dios. A través de una compasión desgarradora, se descubren y se cuidan las comunidades vulnerables. Las nuevas creaciones y comunidades son los nuevos testigos en las plazas públicas y en las ciudades.
(Proverbios 3:5, 11:10, 13:15, 15, 29:7; Salmo 24:4, 100:3; Mateo 6:33; 1 Corintios 6:19-20; Apocalipsis 21:5)
Yesua: Salvación, liberación, discípulos de por vida es nuestra meta final mientras caminamos humildemente, dando a conocer el mensaje de la cruz.
El propósito redentor de Dios se cumple en nuestra liberación mediante la obediencia a Cristo en su muerte y resurrección a la gloria. Él ha hecho expiación por nosotros mediante el derramamiento de su sangre sin mancha. Su victoria sobre el pecado y la muerte, Su ascensión y Su prometido regreso, son nuestra esperanza de resurrección. El modo, el método y los motivos de la cruz son definitivos para el mensaje que declaramos, del que damos testimonio de forma decisiva.
(Gálatas 3:8; Hebreos 13:10-14; Éxodo 11-14; Levítico 5:14-6:7; Isaías 52:13-53:12; Lamentaciones 1:12-13; Zacarías 8, 14; Mateo; Marcos; Lucas; Juan; Hechos; Romanos 5, 7: 23-24, 8:21-22; 1 Corintios 5:7-8, 15; Filipenses 2:5-9; 1 Tesalonicenses 4:13-5:11; 1 Pedro 1:19, 2:23-24; Apocalipsis 19, 20)
¹Hemos elegido palabras hebreas para nuestro Ethos y Principios Fundamentales.